El ibis destaca por su plumaje blanco, matizado de rosa en las alas y la cola, además de por su característica "máscara" roja, sus patas coloreadas y su pico arqueado. El hábitat de este ave han sido siempre los humedales y marismas, así como los grandes bosques de pinos. Entre el lodo de los humedales y los campos de arroz encuentran el alimento para su supervivencia: cangrejos, pececillos, pequeñas ranas o insectos. En los grandes árboles es donde anidan y se reúnen formando colonias.

 

Uno de los principales problemas a los que hace frente esta especie depende de la demanda humana. La necesidad de madera para construcciones y calefacción han provocado la sobreexplotación de bosques y selvas, por lo que el Ibis queda desprotejido y sinun lugar fijo donde criar sus huevos. Además, progresivamente se ha ido aumentando el uso de pesticidas y plaguicidas en la agricultura para asegurar la resistencia de los cultivos, lo que dañó la salud de las aves al ingerir el alimento contaminado. El declive del Ibis nipón también se cree que es debido al secado de los arrozales y la sustitución de este cultivo por tierras de secano, en las cuales se puede cultivar el trigo, lo que supone la disminución de la superficie disponible para su alimentación.

 

Como consecuencia de todo esto, a finales de los 70 quedaban menos de 10 ejemplares de Ibis silvestres en Japón y en 2003 se extinguieron por completo. Sin embargo, quedaron algunos individuos que, en 1962, se habían capturado en previsión de su extinción.En noviembre de 2007, se celebró en Japón un Simposio Internacional para intentar salvar de la extinción al ave. Se formó un grupo de especialistas para que llevaran a cabo el seguimiento de esta especie para conocer la tendencia de su población, controlando así el número de nacimientos y de muertes, estableciendo áreas protegidas de humedales, etc. Se consideró también la posibilidad de aprovisionar de alimentos complementarios al Ibis en arrozales, utilizar menos cantidad de productos químicos en el cultivo del arroz e inundar campos en barbecho donde los Ibis pudieran buscar sus presas.

 

Actualmente se han tomado serias medidas para proteger a los Ibis salvajes y tratar de criarlos en cautiverio para asegurar la supervivencia de la especie.